30 mar 2008

Veladas poéticas

Anoche asistí a una intensa y emocionante velada donde Andrés Aberasturi nos leyó su libro "Un blanco deslumbramiento", un largo poema dedicado a su hijo con parálisis cerebral. El poema relata el viaje al centro de su dolor (como le incitó José Hierro) en 1980 en el Hospital La Paz, se torna en "vieja cicatriz" y termina "En casa" en 1988. Si antes admiraba a este periodista, ahora me emocionan sus escritos hasta lo indecible...
Fue ella, hijo, fue ella
-y tú en sus brazos
mortal y rosa,
mi niño fieramente ángel,
mi ángel fieramente humano-
fue ella quien se irguió
sin odio
frente a la desgracia
y empezó a caminar plantando cara y alma
a tu destino incierto,
a la muerte feroz equivocada.
Y cruzó la engañosa ciudad
del desamparo. Dejó atrás
los desiertos de la nada.
Atravesó los arecifes de la fácil huida.
Anduvo sin mojarse sobre las aguas
turbias del miedo y la amenaza;
y nunca lloró
teniéndote en los brazos.
Cuando encontró la paz
al fin,
cuando ella y tú os mirasteis
y de aquella mirada
nació la fuerza más grande de la tierra,
entonces
empezó a levantar
para tí,
para todos,
la ciudad de la esperanza.
Pintó los horizontes transparentes,
derribó las murallas,
te hizo caminos nuevos
y llenó las distancias
de puentes y de sombras;
colgó del cielo estrellas
sólo para que tú las vieses
y para ti hizo cierta
la hasta entonces
dudosa luz del alba.
Esta parte del poema habla de su mujer. Pero el poema entero te hace reflexionar y pensar qué hubiera hecho si me hubiera encontrado en parecida situación?
Allí había otros padres con el mismo problema pero la manera de enfrentarse a esa terrible situación parecía distinta.
Emotiva velada, muy emotiva y con el alma a flor de piel.

8 comentarios:

Consejo de Barrio de Gamonal dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Fede dijo...

Querida Ana
No sé si emocioanrme por el cariño que rezuma este poema, o emocionarme por la humildad de Andrés y por su canto de amor hacia su esposa.
En cualquier caso es sobrecogedor.
Tengo entendido y habría que debatir el cómo y el por qué, pero siempre que existe en una familia una persona con necesidades especiales, se observa un derroche de cariño por parte no sólo de los padres, sino de absolutamente toda la familia.

Paquita dijo...

Amiga mia
Lo que dice Fede lo hemos podido comentar por telefono, pero al leerlo es mas sobrecogedor, imagino que oírselo seria desgarrador.
Un besito
Paquita

Cálida Brisa dijo...

Amiga
Me apetece compartir contigo el premio ''Brillante Weblog 2008''
Recogelo en mi blogs
Gracias

Willow dijo...

Querido Fede, si, es sobrecogedor y muy hermoso, por eso lo elegí entre todos los poemas del libro, porque me hablaba del amor hacia su mujer y su hijo.
Siento que cuando hay alguien tan especial, es normal que el corazón se vaya detrás a protegerlos y quererlos, pues son los que más necesitan esa ternura, afecto y cuidados.

Willow dijo...

Querida Paquita, casi todos los que estábamos allí acabamos muy emocionados y llorando. Un beso

Cálida Brisa dijo...

Amiga Willow
Hace unas horas mi amiga Isabel, me comunicaba que pasara por su blogs a escoger uno de los premios que tenia expuestos y escogi el de:

''Nos Une La Amistad''

Fué verlo y pensar con quien lo iba a compartir, porque parece que de verdad estuviera hecho para nosotros.

Lo he querido compartir con los amigos del foro de Msn, tú bien sabes que entre nosotros fluye una amistad muy linda y muy sentida, a pesar de que alguna que otra vez hayamos hecho bromas, pero nos queremos de verdad y sobretodo nos respetamos y no nos olvidamos, que es lo mas importante.

Asi que pasate a recogerlo y escribe algo nuevo guapa que te vamos a tener la primera pagina del blogs llena de premios jajaja

Un abrazo grande, grande, de oso como dicen los niños.

Willow dijo...

jajaja... ¡me encantan los abrazos de oso! Oye, pues me has dado una idea; no estaría mal tener sólo un blog para premios, de ida y vuelta, jajajaja... ya lo copié pero no había entrado, así que ahorita mismo lo pongo.... Gracias... ¡tú si que vales! Mua, mua, mua, mua, mua...